Read this in your language :)

lunes, 29 de octubre de 2012

Perdón...


Hola, (un)chico(que me hace)feliz.
Te escribo esto como continuación de (*) . 

Sólo quiero decirte algo… PERDÓN.

Perdón por ser tan gilipollas, perdón por tener tanto orgullo, perdón por todos esos piques y enfados. Perdón por decirte todo lo que me tendría que callar. Perdón por pagar a veces mis problemas contigo y contestarte borde. Perdón por decepcionarte día tras día. Perdón por no ser lo que esperas. Perdón por no ser esa amiga que te mereces. Perdón por hacer que estés mal por mi culpa. Perdón por hablarte mucho si necesitas tu espacio. Perdón por hacer que pares de jugar a la Play por atenderme. Perdón por protestarte todas las noches cuando te vas a dormir. Perdón por apoyarme tanto en ti. Perdón por ponerme nerviosa cuando tardas en contestarme porque no estás. Perdón por quitarte la ilusión muchas veces. Perdón  por hacerte escoger mal […] Perdón por millones de cosas más. Y sobre todo perdón por lo de esta noche.
Sabes que soy cabezota, y que sigo con la puta idea en la cabeza de que deberías buscarte a alguien mejor, que no te haga pasar por lo que yo te hago pasar. Alguien que de verdad te entienda siempre y esté de acuerdo contigo. Alguien que siempre esté a tu favor y no en contra. Y alguien que realmente te haga feliz siempre.

Te lo juro, intento hacerlo, pero me es imposible no decir lo que pienso. Es un fallo, gordo, lo sé. Pero es irremediable. Lo siento.

Y creo que aunque me falten todavía algunas cosillas voy a ir terminando esto, porque me queda todavía mucho que hacer y ya me estás dando las buenas noches.

Ah. Y perdón por no estar allí y poderte dar un abrazo después de cada pelea, porque realmente,  yo creo que es lo que más me revienta de todo.
Pero a pesar de todo esto, te quiero mucho, de verdad.

Buenas noches, descansa y hasta mañana a las och… no, mierda, antes. A las siete y media.

Te envío muchos besitos. Y recuerda: UN <4 + UN  ES POCO .

 
PD: La cama de arriba es mía, y ahí no admito negociación.

 

 

                                                                                                     Mery Lú.

martes, 14 de agosto de 2012

Esa gente...


Odio esa gente que quiere ser respetada y no respeta. Odio esa gente que se cree mejor que los demás. Odio todas esas injusticias que ya son tan habituales de ver que parece que las cosas tienen que ser así. Odio esa gente prepotente que si no actúas como ellos quieren no eres nadie. Odio la típica gente famosa que te mira por encima del hombro, cuando han llegado ahí por nada; por salir con alguna estrella o por estar criticando a los demás famosos en programas que no tienen ni un mínimo nivel de inteligencia pero que simplemente tienen audiencia por si se crea una pelea en medio del plató.

El otro día ocurrió una cosa que me llamó la atención y me di cuenta que en una “discusión” no siempre uno es el que tiene que llevar toda la razón: Vi a una chica que le dijo a una pequeña (gran)  estrella de la televisión: “Te voy a dejar de seguir porque para que no me respondas ni un puto tweet...I pass.” A lo que él respondió: “si te envían 230 sms cada hora,¿ respondes a todos?”  Y ella dijo: “pues lo intentaría, pero no responder a nadie...los famosos solo respondéis cuando os critican, está demostrado.” A lo que él dijo varia gente a la que sí respondía.  La chica volvió a insistir en que sólo le había respondido cuando le criticaba y nunca cuando le había dicho cosas bonitas. (Antes de nada destacar que este famoso, a mi parecer, se ha currado llegar hasta donde está y no me parece nada prepotente y es uno de los pocos que sigue con los pies en la Tierra) .  En esta situación podemos destacar dos partes: La parte de la chica, que a mi parecer,  también tiene su parte de razón al decir que sólo la había contestado cuando le había criticado. Creo que es cierto, que los “famosos” deberían intentar contestar la mayoría de las menciones posibles, como dijo él, es imposible contestar absolutamente todas, es lógico, pero las que pudiesen sí.  Por otra parte hablando de él no sólo se debería centrar en esa gente que mencionó, hay muchísima más gente -  no me incluyo -  que se lo merece también y recuerdo, que gracias a esa gente está dónde está.

Tampoco me hace mucha gracia la gente que critica tus gustos musicales. Por eso hay distintos tipos, para que todo el mundo tenga algo que le guste pero si a ti no te gusta uno, vale, no te gusta, pero ya, te callas, no critiques porque luego cuando te critiquen los tuyos  se armará y no te gustará.

Y podría añadir 3000 cosas más, que no haré, por ahora, porque si no esto se haría interminable.